Cómo contratar a una trabajadora del sexo

Así que has decidido pagar por un rato sexy. ¡Enhorabuena! Dado que muchas personas importantes en mi vida dependen de los ingresos generados por el trabajo “adulto”, apoyo tu elección. Pero como con todas las oportunidades de la vida, hay una forma correcta de hacerlo y una incorrecta.
Tanto si se trata de un viaje espontáneo a un travieso salón de masajes como de una noche épica meticulosamente planeada con alguien profesionalmente sexy, estos consejos deberían ayudarte a conseguir y disfrutar del proveedor erótico de tus sueños.
Utiliza Internet
Hay muchísimos sitios donde contratar a gente sexy, y en todos hay gente buena, así que no puedo recomendar uno sobre los demás. Usa tu fideo -el de la cabeza- a la hora de seleccionar a quién contactar. Si alguien tiene fotos de alta calidad y el cuerpo de una top model de ropa interior pero sólo pide 150 dólares la hora, probablemente deberías sospechar.
Los engaños son habituales incluso en los sitios que cobran cientos de dólares por anuncio, pero si utiliza el sentido común, debería poder evitarlos. (Hablando de eso, si descubres que la persona que está en la puerta no es la que aparece en el anuncio, probablemente deberías marcharte por muy cachondo que estés. La tergiversación dramática es una bandera roja para más deshonestidad).
No les hagas perder el tiempo
Es normal que te sientas inseguro o nervioso sobre tu decisión de contratar unas putas en Perú, sobre todo si nunca has hecho esto antes. Quedar con un desconocido en circunstancias íntimas puede ser intimidante, y puede que te preocupe la legalidad o el estigma que rodea a lo que estás a punto de hacer.
Pero no seas de los que envían correos electrónicos sin intención sincera de reservar. Puede que te siga la corriente si te haces el interesado, pero difícil de conseguir, e intente convencerte de que es la persona que quieres. Pero también existe la posibilidad de que la trabajadora en la que estás interesado se niegue a recibirte o te incluya en una lista negra, y puedes estar seguro de que si finalmente lo consigues, se presentará molesta y esperando que seas tan odioso en persona como lo has sido en su bandeja de entrada.
Tómate tu tiempo para investigar y ten claro a quién te gustaría conocer antes de ponerte en contacto con él. Si tienes alguna pregunta que pueda decidirte a concertar una cita, y esa información no está ya a tu disposición, puedes preguntar: ¿Tiene algún tatuaje? Si cubro los gastos, ¿estaría dispuesto a organizar un hotel? Pero sé breve y agradece su tiempo en tu primera comunicación.